Pascasia Policía - Capítulo 27 | La misión secreta

Su se acercó a las tres mocosas. No podía contener la rabia...

"¿Qué plumbobs hacen aquí? ¡Fuera de mi vista ya!", les dijo furiosa

"¿No te ha gustado la sorpresa, Su Pascasia?", soltó Clementine. "Hemos venido a acompañarte en tu misión secreta"

"Sabemos que tienes una misión secreta", continuó Jolene. "Hemos visto como te cambias de ropa al salir de casa, cuando crees que nadie te ve. Y luego dices que estás haciendo papeleo...

"Solo queremos ayudar", dijo Charlene con un hilo de voz

"¡A CASA LAS TRES!", gritó Su, fuera de sí

"¿O qué?", preguntó Jolene con una sonrisa falsa

Mientras tanto, en pleno desierto, dos pares de piernas se acercaban sigilosamente a una edificación.

Había un par de guardias al otro lado. Conversaban sobre sus aventuras ñiqui ñiquiles en los arbustos... por lo que describían se podría pensar que estaban inventando todo...

Las mocosas arrastraron a Su a un pequeño parque cerca de la plaza de Strangerville

"¡No tengo tiempo para tonterías!", decía Su. "¿Cómo ha llegado hasta aquí? ¿Dónde está la mayordoma?"

"¿Tú que crees?", le preguntó irónicamente Jolene

"Que la han matado y han escapado", soltó Su con la misma ironía

"¡Claro que no! Simplemente está dormida. Nosotras solo queremos ayudarte en tu misión secreta, así que nos vinimos por el atajo...", comentó Charlene

"¡CÁLLATE!", dijeron Jolene y Clementine al unísono

"¡Qué bonitas! Pues la mejor manera de ayudarme es largándose", explicó Su con amargura en la voz. Sabía que no servía de nada negar lo de la 'misión secreta'. "Por cada minuto que estoy aquí la misión secreta se retrasa"

Ny’rkl había estado practicando hipnotizar a otros seres sin quitarse su disfraz humano. Siempre había sido muy talentoso, por lo que no fue nada difícil lograrlo. Con sus poderes logró hacer creer a los guardias que era hora de irse a casa... Esto iba a ser pan comido.

Emma Herminia Adelaida Albaricoque sonrió para sí misma. Si lograban hacer esto serían libres por fin. Ny’rkl recuperaría a su madre y podría vivir tranquilo con ella y su padres después de una vida entera de esclavitud. Emma también sería libre y finalmente la dejarían en paz...

Tanto Ny’rkl como ella habían logrado negociar su liberación con lo Kritixianos... bueno, más bien estos se la habían prometido a cambio de que cumplieran cierta misión. Como sabemos, los kritixianos no tienen cuerpo físico y es lo que más anhelan. En su época como esclava Emma había estado asignada al sector de investigación y desarrollo, quienes se encargaban de encontrar maneras de hacer corpóreos a los kritixianos.

Por suerte o por desgracia, Emma había dado con la fórmula más idónea: encarnar en una especie de planta alterada genéticamente para albergar a los kritixianos. Una planta tan poderosa que podría esparcir sus esporas y llegar a poseer los cuerpos simhumanos. Esto consolidaría a los kritixianos. Al lograrlo serían indetenibles en todo el multiverso sim...

Los kritixianos tenían clara su próxima conquista: la tierra sim. Por lo tanto, enviaron de vuelta a Emma con una misión: encontrar el mejor lugar para plantar a 'la madre'. Una vez que la madre fuera plantada podría esparcir a sus hijos por el mundo y poco a poco apoderarse de todo. A cambio, Emma recibiría su libertad e inmunidad junto a su familia, y tendría para siempre un asiento en el Ministerio de investigación y desarrollo científico que los kritixianos planeaban establecer en esta nueva colonia de la simtierra.

Emma había encontrado el mejor lugar: Strangerville. Era un pueblo seco y un tanto perdido, pero su clima era ideal para el rápido desarrollo de la madre. El laboratorio de Strangerville tenía muchos secretos e investigaciones relacionadas con el espacio exterior (aunque curiosamente ninguna conexión obvia con la SIMNASA)... y ese sería el mejor lugar para plantarla... todo parecería un accidente... un conveniente accidente del que la SIMNASA se enteraría y trataría de ocultar, lo cual daría el tiempo necesario a la madre para crecer...

Sabía que no iba a trabajar sola y que alguien más sería de ayuda, pero los kritixianos no revelaron su identidad. Eran muy desconfiados y querían evitar complots, así que una vez que Emma fue enviada a la tierra, eligieron como compañero de misión a Ny’rkl, un joven stikiano, esclavo, que trabajaba en el mismo sector que Emma. Le prometieron que si cumplía su misión liberarían también a sus padres y los tres tendrían inmunidad (aunque el padre de Ny’rkl huyó antes de lo debido, pues no quería que su hijo cumpliera esa cruel misión que esclavizaría a más seres).

El plan original era que Emma y su compañero se reunieran solo cuando llegara el momento de plantar a la madre, pero el destino los había juntado antes y ambos se dieron cuenta de que eran compañeros de misión. Ny’rkl, alias Emilio, debía infiltrarse en las fuerzas de defensa de los simhumanos y facilitar el proceso todo lo necesario... ya sea hipnotizando a la gente y desviando su atención de la madre o como agente doble que fingiera investigar el tema de la planta si algún simhumano la encontraba...

Mientras Emma investigaba el mejor lugar para plantar a la madre, Ny’rkl se convertía en policía y comprendía cada vez más a los simhumanos. A la vez Emma enviaba información a los kritixianos de sus hallazgos.

Originalmente los kritixianos enviarían la localización del lugar que dijera Emma a Ny’rkl. Obviamente esto ya no hacía falta, pero eso no lo tenían que saber los kritixianos (igualmente Emma envió la localización a los kritixianos y estos la enviaron a Ny’rkl... solo por apariencias. Los kritixianos eran muy poderosos y tenían muchos vasallos corpóreos que podían entrar a la simtierra y pulverizarlos con un láser si se saltaban el protocolo).

Ny’rkl, además, era muy necesario, pues no solo se había encargado de investigar los detalles del laboratorio, sino que en los experimentos de Emma se había determinado que 'la madre' necesitaba sangre fresca de un alien corpóreo para afianzarse. ¡Curioso! A veces la ciencia tiene unos toques que recuerdan a la brujería...

Las niñas no entraban en razón y Su ya no podía más. Les gritó furiosa que llegaría tarde, que se iba y las dejaría solas, que si venía La Parca o un loco y se las llevaba ella no se iba a sentir culpable... pero nada hacía efecto. Las tres estaban decididas a acompañarla...

¿pero adónde? Probablemente, Emilio ya se había ido... no podría encontrarlo... ¡Maldita sea!

"¿Entonces, Pascasia? ¿A dónde vamos?", preguntó Clementine

"¡A ningún lado! Gracias a ustedes no podré cumplir 'la misión'", dijo Su mientras pensaba en lo que debía hacer al día siguiente... seguiría a Emilio y lo atacaría con el rayo congelador y el extreme violence... total, no tenía nada que perder

"Vinimos para ayudar... si por eso no puedes cumplir la misión tal vez es que no eres tan buena como crees", soltó Jolene

"¡Tenía que seguir a alguien, niña estúpida! ¿Lo entiendes? Y en vez de eso estoy perdiendo el tiempo aquí sentada. ¡Tengo que buscarlo en el desierto!", chilló Su

"¿En el desierto? Pero eso es enooooorme", soltó Charlene

"A ver... ¿Qué hay en el desierto?", preguntó Jolene

"Arena", dijo Clementine con un tono de 'qué estupidez es esta'

"¡Es que eres tonta!", chilló Jolene

Su empezó a pensar en usar el rayo congelador en las tres mocosas...

"En el desierto está el laboratorio", dijo Charlene con tono dudoso

"¡Bingo!", exclamó Jolene

A Su se le iluminó el rostro y salió corriendo mientras que ponía la localización en el GPS. Las mocosas la siguieron...

Emma Herminia Adelaida Albaricoque le dio la llave que había inventado a su compañero. Según los descubrimientos de Ny’rkl, los científicos tenían varias plantas de origen extraterrestre en el sótano, pero para acceder se necesitaba una llave especial. Emma, por supuesto, había inventado una.

Ese sótano sería el mejor lugar para plantar a la madre y hacer que pareciera todo un accidente por experimentar con plantas alienígenas...

"¿Tienes la muestra, verdad?", quiso asegurarse el alien

"Sí", respondió Emma

"¿Lo necesario para extraer mi sangre?"

"También. No se me ha olvidado nada, Ny’rkl. ¿Estás bien?"

"Es que...", dijo el alien dudoso. Le venía a la mente su padre, quien le había vuelto a pedir que no hiciera esto, que era mejor huir. "Nada... solo que..."

"Tienes dudas", finalizó Emma. Él asintió. "Si no lo hacemos nosotros enviarán a otras personas. Será cuestión de tiempo..."

Ny’rkl asintió de nuevo. Ambos entraron al laboratorio.

Pascasia Susana Montes Albaricoque, mejor conocida como Su, corrió como nunca en su vida. Llegó al laboratorio con las tres mocosas prácticamente pegadas a ella. Dio vueltas al lugar y trató de abrir las puertas, pero era imposible... no había ni rastro del alien...

En fin, no podía probar nada, no podía saber si realmente Emilio y su abuela eran cómplices. No podía saber si habían estado en este lugar. Tuvo ganas de gritar sus nombres y pedirles que salieran, pero recordó que las mocosas estúpidas la seguían a todas partes... a saber si esos dos les hacían algo...

Definitivamente Su no podía confiar en nadie. Furiosa y derrotada se marchó a casa. Las mocosas la siguieron y le hicieron miles de preguntas. ¿A quién buscaba? ¿Por qué? ¿Por qué no tenía apoyo del resto de la policía? ¿Es porque la misión era muy secreta? ¿Qué iba a hacer ahora? ¿Por qué era tan amargada?

Su ignoró cada una de sus respuestas y brevemente se preguntó qué sería de ella...

Continuará...

Si alguien quiere conocer la historia completa de esta familia y TODOS los dramas que hay detrás, puede ver la serie donde se originó todo: La Granja Albaricoque

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